Historia

Mayo de 2019 22:30 de la noche.
Jessica recibe una llamada de su amiga Naroa, extrañada (Naroa nunca llama por teléfono), coge el teléfono y se encuentra con una persona algo enfadada, decepcionada, no son adjetivos que describan a su amiga por lo que intenta indagar y se da cuenta de que le falta algo, le falta conseguir su sueño y el sentido por el que había trabajado todo este tiempo, su propia colección, plasmar todo lo que le pasa por la cabeza y mostrárselo al mundo en forma marca de moda. Pero claro, no es fácil, hay que seguir trabajando y lamentándolo el día sólo tiene 24 horas.
Al día siguiente.
Quedan para comer al día siguiente y desahogarse, aunque Jessica se queda toda la noche pensativa y haciendo un millón de cuentas (es lo que le va, controlarlo todo), conociendo a Naroa su firma iba a ser elegante, atrevida, original y, como ella, única. Así que durante la comida le propone montar una firma entre las dos, Naroa obviamente la parte creativa y control de calidad de las prendas, Jessica la parte analítica y de gestión. A lo que Naroa responde que sí, por lo que se ponen manos a la obra con la intención de salir al mercado en marzo de 2020.
2020.
Después de muchos viajes y contactos en busca de telas, taller de confección… teniendo ya decidido casi todo surge lo que todos hemos vivido y llamamos pandemia, decidimos parar la colección ante la incertidumbre creada y adaptarla a la temporada siguiente.
Durante ese año decidimos dar un paso más y darle un toque más personal por lo que montamos el taller de confección propio, de esta manera podemos asegurar la calidad de las prendas, nos gusta cuidar los detalles y estar físicamente en el taller nos permite hacerlo, además de trabajar con talleres nacionales para completar las colecciones
2021.
Y de esta manera es como nace MIHDU, como colección, como taller, como representación de lo que somos nosotras: respeto, sinceridad y sobre todo autenticidad
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